EDIFICIOS CON APODOS.
Se presentará una investigación sobre un tema muy
controversial; los edificios con apodo son una situación implícita en la ciudad
contemporánea, hoy en día se trata de una situación elemental he inevitable, es
la manera con que las personas hacen de cierta manera suyo el entorno y la
arquitectura.
Sin duda en México, la arquitectura juega un importantísimo
papel en la cultura y realidad cotidiana. Se puede decir que alrededor de todas
las ciudades del país, destaca el eclecticismo arquitectónico, ya que se
aprecian vestigios prehispánicos y coloniales, al mismo tiempo que vemos
edificaciones modernas desdoblándose por las avenidas más importantes.
Pero lo cierto es, que hay símbolos arquitectónicos, cuyos
nombres son realmente apodos. Son los mismos usuarios quienes se han encargado
de darles estos peculiares nombres, los cuales se deben al aspecto evidente de
estos edificios y monumentos.
Y es que una característica particular de los mexicanos es
ponerle apodos a prácticamente todo. Si una persona se viste de forma diferente
a lo ordinario, si tiene una personalidad peculiar, dijo o hizo algo fuera de lugar,
esa persona con todo su pesar tendrá un apodo que se llevará a la tumba.
ORIGEN.
La pareidolia es un
fenómeno psicológico que consiste en que podamos percibir un rostro o una
figura humana o animal en lugares de lo más insospechados: la forma de estar
colocadas las ventanas/puertas en un edificio, la parte posterior de un
despertador, una nube, en una tostada, una grifería, etc.
Y es de este fenómeno en especial por el cual las personas
logran ver no solo rostros en las cosas, si no que de ahí deriva la habilidad
por el cual relacionamos los edificios con formas inusuales y hace que nos
preguntemos ¿Qué forma tiene?
Uno de los logros más significativos en arquitectura
sucede, cuando la gente común en las ciudades se identifica con las casas,
edificios o espacios públicos, haciéndolos culturalmente suyos, pasando a
formar parte significativa de las imágenes y lugares donde desarrolla su vida
cotidiana. Este fenómeno de relación social, arquitectónica y urbana se
manifiesta de distintas maneras: Por un lado, dada la frecuencia con la que se
visita una obra determinada, relacionándola con las actividades de la vida
diaria.
En otro sentido, cuando las obras se vuelven hitos visuales de
referencia, que sirven para ubicarse cuando se recorren las ciudades o también
cuando las obras representan valores o hechos de carácter social, político,
religioso o cultural. Como parte del proceso anterior, la identificación ó
relación social puede suceder cuando las formas de las obras se asocian a
imágenes u objetos que forman parte de los usos y costumbres del día con día de
la sociedad. Esto último es un fenómeno frecuente en el desarrollo de las
ciudades y las sociedades. Si se piensa en la ciudad de México, a manera de
ejemplo, existe en este sentido un amplio repertorio de edificios públicos que
la gente conoce con un mote o apodo de referencia, dada la presencia gestual de
los mismos.
EJEMPLOS.
La estela de luz.
Con motivo del Bicentenario de la Independencia de México
fue que se construyó este monumento. Al ser un monumento convocado por el
Gobierno Federal, la importancia que se le otorgó en su momento fue muy grande.
Pero su forma vertical, alta, delgada y cuadriculada le dio uno de los apodos
más famosos de todos: La Suavicrema.
Calakmul.
En 1994, se inauguró este complejo corporativo en Santa Fe
que alberga a empresas como Pepsi Co., Phillips Morris y Ericsson, entre otras.
Fue concebida por el arquitecto Agustin Hernández Navarro. Según su creador,
los cuadrados representan la tierra y los círculos el cielo, elementos
perennes. Sin embargo, pocos son los que logran capturar el simbolismo detrás
de esta arquitectura abstracta. En cambio, lo llaman de una manera más sencilla
de recordar: La Lavadora.
Torre de Arcos Bosques.
Durante 1996, fue uno de los edificios más altos de todo
CDMX. Es también uno de los emblemas de la zona corporativa de Cuajimalpa. Es
obra de los reconocidos arquitectos Teodoro González de León, Francisco Serrano
Cacho y Carlos Tejeda. Más, tiene uno de los apodos más memorables: El
Pantalón.
Museo Soumaya.
El Museo Soumaya, está ubicado en Boulervard Miguel de
Cervantes Saavedra, en Polanco. Fue diseñado por el arquitecto Fernando Romero
e inaugurado en 2011. La fachada asimétrica consiste en un armazón envolvente
recubierto por más de 16,000 módulos hexagonales de aluminio plateado. Mucha
gente no le asemeja a un cuello femenino sino más bien a un objeto más
cotidiano, un florero, además de que su localización se presta también para el
sobrenombre pues se encuentra en medio de varios edificios y plazas: El Florero.
Es un edifico ubicado en la parte baja de las Lomas de
Chapultepec, junto al bosque; tiene una altura de 121 metros.
Es obra del arquitecto mexicano Teodoro González de León y
el diseño estructural es trabajo de la firma internacional inglesa Arup: El
dorito
EN VERACRUZ.
LEVANT BOCA es un desarrollo de usos mixtos ubicado frente
al mar, conformado por dos torres de departamentos y en su planta baja una
plaza comercial, distribuidos estratégicamente logrando una total independencia
y privacidad entre cada una de sus áreas. Al ser un punto de reunión la gente
local opta por llamarlas “las gemelitas” debido
a la similitud entre ambos edificios.
Yéndonos un poco a lo histórico del puerto de Veracruz
existen unas antiguas construcciones que hasta el día de hoy siguen en pie como
parte del centro historio de Veracruz; El
edificio de Correos y Telégrafos, las construcciones “gemelas” ubicadas en la Plaza de la República y colindantes al
Edificio de Aduanas, fueron inauguradas en el año de 1902 por el ex presidente
Porfirio Díaz. El diseño de estos espacios históricos y de servicios, así como
sus fachadas de estilo neoclásico, fueron supervisados y construidos por el
Ingeniero Salvador Echegaray.
Comentarios
Publicar un comentario